Algunos recuerdos permanecen más tiempo que otros.

El Reloj Monumental de Pachuca no solo marca las horas: marca historias, encuentros, pasos compartidos y silencios cargados de memoria. Desde su inauguración en 1910, este ícono arquitectónico se ha erguido en el corazón de la ciudad como un testigo fiel del tiempo, de la transformación urbana, y sobre todo, de la vida de sus habitantes.

“Memorias del Reloj” es una exposición que a través de ilustración, acuarela y fotografía, artistas nos comparten su visión íntima y creativa de este monumento, resignificándolo como símbolo de identidad colectiva y punto de reunión.

Cada pieza  muestra un reflejo de las múltiples formas en que los pachuqueños han hecho suyo este espacio. Desde encuentros casuales hasta celebraciones históricas, desde la nostalgia de una despedida hasta el asombro de una primera visita, el Reloj ha sido escenario y testigo de un sinfín de momentos que conforman la memoria viva de la capital.

Hoy, te invitamos a detenerte frente al Reloj no solo como monumento, sino como archivo emocional, como espacio simbólico donde el tiempo no se mide solo en minutos, sino en memorias compartidas.